Muchos bares y restaurantes que están capacitados para disponer de terraza y que hasta ahora, tan sólo la utilizaban durante los meses de verano, han decidido incluir toldos en la misma, debido a la nueva normativa contra el tabaco.
Desde el pasado 2 de enero, no se permite fumar en los bares y restaurantes, por lo que la instalación de toldos, cerramientos y pérgolas ha proliferado muy rápidamente. Con esta nueva estrategia, los hosteleros pretenden no perder clientes.
Según las empresas de venta e instalación de toldos en este último mes se han disparado las peticiones de presupuesto y cada día se cierran nuevos contratos con bares para cerrar su terraza.
Asimismo, estos cerramientos supondrán un cambio en la imagen de las ciudades. Por este motivo, los ayuntamientos han tenido también que modificar sus ordenanzas sobre las terrazas, que hasta ahora tan solo albergaban actividad en verano con sillas y mesas.
Así pues, se permite fumar en lugares que tengan como máximo, un techo y dos paredes. Sin embargo, muchos establecimientos están montando los cerramientos con tres paredes para proteger de una manera más efectiva del frío, aunque éstos cuentan con una infraestructura que les permite bajar una de las paredes cuando los clientes quieran fumar. Lo que todavía no está decidido es si se van a limitar los materiales con los cuales están hechas estas instancias o no.
Los tipos de cubrimientos que están utilizando los hosteleros van desde sombrillas de lona con tratamiento repelente de agua, hasta toldos automatizados, así como mamparas con raíles, paravientos desplegables o lonas enrollables.
Foto: Acea Bara Toldos